Payasos Dopados, entrevista realizada en Zafra, "hablando claro"

Entrevistas

Ángel Ávila

Conciertos Extremadura | Payasos Dopados |

Una sala de prensa repleta -las televisiones se molestan entre sí con las cámaras, los fotógrafos buscan el mejor ángulo, los reporteros sitúan las grabadoras para captar el mejor audio y se sientan para tomar notas- expectantes con la inminente salida de las estrellas musicales.

No se habrán enterado que la Princesa de Asturias ha visitado Extremadura o que iba a recibir al Papa, en esta ocasión con su marido; Su Alteza el Príncipe de Asturias. Los reporteros del mundo han decidido ir al “espacio para la creación joven” de Zafra. Allí unos dopados han conquistado el mundo. Lleno hasta la bandera -la entrada era gratuita, pero si hubiera costado 80 € habría tenido el mismo público, bueno no-

Disfrutamos de una formación sólida, potente, incansable, insaciable, plena, y bailan hasta los ángeles, con un sonido celestial, por algo estamos en el auditorio referente mundial … ¡joder el p.. despertador! (Esto es cierto incluso con el despertador realizando su función)

Ya decía en la anterior entrevista que podría contar milongas, pero no es mi intención en ningún instante.

El timbre de ese despertador me ha llevado a la realidad, anoche en Zafra se realizó un concierto que nunca debería haberse celebrado. Atención señores políticos, no mezclemos jamón de bellota con el blanco, así nos luce el pelo y ellos a su felicidad plena. Como pudieron comprobar, ah no si no se acercó ninguno y para qué. El caso es que en lo que es un magnífico edificio con posibilidad para realizar múltiples actividades se olvidaron que allí se podían celebrar conciertos, pero no contaron con ingenieros de sonido. El espacio se lo podrían conceder para celebrar competiciones automovilísticas, ciclismo o motociclismo… y para qué seguir, creo que ha quedado claro.

La noche se presentaba perfecta, concierto de Payasos Dopados, un grupo con un talento que no aparentan, su desenfado y maneras, encima de su reino, parece que lo que hacen les sale sin más, sin importancia. Con un estilo y sonido propios realizando un ska, punk, reggae (y ayer algo de jazz por las circunstancias) combinado con una diversión constante ofrecieron un repaso de su propia cosecha. Un técnico de sonido loco y resignado ante la realidad.

Poco más de unas decenas de asistentes disfrutaron de los dopados. A uno le queda la esperanza de volver a verlos en otra ocasión en un lugar sin problemas de acústica.

Como hemos contado anteriormente, la entrevista –se realizó al lado de los contenedores de basura, cierto que no desprendían malos olores, y no nos importó, en buena compañía se habla en cualquier lugar.

Dejaremos el video clip de Payasos Dopados, en el reproductor de videos, unos días en el primer lugar para que puedan disfrutar de la dopadina.